Tarde

Últimamente llego siempre tarde a todos los sitios. Es que no se que hora es. No se que hora es. Mi ordenador marca las 18:40, mi móvil las 18:33, mi tableta las 18:34 y mi despertador las 18:45.  Enciendo el televisor, y éste me indica que son las 18:31. En un canal dicen que estamos en 1936, en otro, que hemos vuelto a 1976 y un tercero proclama que el 2021 ya está aquí. Y con esto de viajar tanto y trabajar fines de semana, no se que día de la semana es. Puedo estar de fiesta un miércoles, trabajar un domingo, el jueves dormir por la mañana y trabajar por la tarde.
Con tanta confusión horaria parece que no avanzo. No soy consciente de mi propia existencia. Observo como pasan días noches, festividades, soy un mero espectador desde la ventana de mi habitación mientras me salen canas y me crece la barba. Definitivamente, el tiempo es relativo.