Los seguros

Los seguros son apuestas pesimistas (algunos dirían que realistas). Es decir, nos apostamos que se averiará el coche y por cuanto (si pensamos que mucho, tendremos un seguro más alto); o lo que le pasará a nuestra casa, si se inundará, o será objeto de un robo etc.. Las agencias de seguros en cambio, son optimistas por naturaleza, apuestan a que nada de eso sucederá (y que no tengan que pagarte nada). Como hay adictos al juego, los hay a los seguros, gente que asegura cada objeto de su hogar para obtener el premio a su apuesta.  Además, las agencias dejan que apuestes pesimistamente a cualquier cosa. Ellos lo estudian, y te ofrecen la cantidad por la que ellos aceptarían la apuesta. Hay unas cuantas cosas que fallan constantemente que apostaría: Mi ordenador, mi teléfono móvil y mi conexión a internet. Todas ellas tecnológicas, posiblemente, directamente no me acepten la apuesta de que van a fallar, seguro que en algún momento lo hacen: mi ordenador morirá solo inexorablemente y sin explicación, mi telefono pasará a ser obsoleto, y mi conexión a internet fallará a pesar del servicio técnico y diferentes operadores.

Como nos pasa con las apuestas, los seguros nos ofrecen una sensación de falso control. Pensamos que podemos influir en el resultado, o nos parece que con una señal u otra podemos vaticinar lo que pasará. Pero casi siempre la "banca" gana, nunca pierde del todo. Todo se reduce a estadística. Mientras ellos apuestan conociendo las probabilidades, nosotros lo hacemos basado en "sensaciones" o "intuiciones". Ellos realmente nunca apuestan. La razón siempre gana al caos.