¿Se te ocurre algo?

He comprobado que soy un enfermo, de la creatividad. Basta con que alguien me diga "Oye, ¿que te parece esto?"o "¿se te ocurre algo para esto?",  para que mi cerebro automáticamente y sin freno empiece a buscar todas las conexiones neuronales que pueda. Solo hace falta una sencilla interrogante, para que lo deje todo en pos de una investigación creativa. Es eso que llaman amor, me imagino. Eso que en tu vida es tu prioridad número uno. Algo por lo que caminarías desiertos, cruzarías Méjico como un ilegal subido en un tren de mercancías, o pasarías por un un gran salón lleno de perros teniéndoles pánico. No, es algo diferente al amor, por amor no se hacen las grandes hazañas, por amor no se llegó a la luna. Llamémoslo ambición, o necesidad vital, algo que has absorbido a través de la piel por osmosis y ahora es parte de tí. Seguro que estoy cruzando la calle mientras se abalanza un coche hacia mí, que si alguien me dice la frase mágica, me olvido del coche, me olvido de donde estoy, me quedo en medio de la calle pensativo haciendo dibujos dentro de mi mente. El coche pegaría un frenazo, pero a mi no me pasaría nada, no estoy allí.