El cielo de los bolígrafos

¿Dónde van todos los bolígrafos que se pierden? ¿Cuántos bolígrafos hemos podido tener a lo largo de nuestra vidas? Ese amigo que te mancha los dedos de tinta. El que no soporta estar en un bolsillo por mucho tiempo. Al final, siempre nos deja sin más. No tiene si quiera una muerte digna. Simplemente desaparece. O un buen día decide que ya basta y deja de funcionar sin razón aparente. Otros, se precipitan desde lo alto de una mesa hasta el vacío. Su fragilidad hace que, cayendo en un punto débil desconocido, se descompongan sin preaviso.  Seguro que hay un espíritu que es el que colecciona bolígrafos. Lo que pasa es que le gusta jugar con el muellecito que llevan dentro. Los desmonta, se queda con el muelle y va dejando las carcasas de plástico en una cueva de hielo que hay en la antártida, así nadie las encontrará. Cuando se deshile, lo comprobaremos. Los exploradores llegarán a bordo de sus vehículos motorizados. "Coronel, algo brilla en el horizonte..". Por supuesto, cuando lleguen a su destino comprobarán la montaña de bolígrafos de todos los tipos y colores. La radio del coronel suena: "Base a equipo de reconocimiento, contesten por favor. ¿han comprobado el resplandor?". El equipo del coronel contestará estupefacto "No hemos visto nada, volvemos a base".